Convocados por la Red Eclesial de Justicia y Paz en la Patria Grande y el Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam) 22 representantes de 13 países de América Latina y el Caribe, 38 dirigentes de organizaciones populares se reunieron, en modo virtual, para conocerse e iniciar un camino juntos en torno a las 4 T del Papa Francisco: techo, trabajo, tierra y tecnología.
Además ha participado el padre Patricio Sarlat, oficial del Dicasterio para la promoción del Desarrollo Humano Integral, quien entregó un saludo en nombre del cardenal Michael Czerny, prefecto de esta instancia.
El sacerdote mexicano destacó destacó que este espacio se realizaba con el fin de fortalecer el diálogo entre los movimientos populares inspirados en los evangelios y en la encíclica Fratelli Tutti
Además de los diálogos, los 60 asistentes se subdividieron en 8 equipos de trabajo para responder la pregunta: ¿Tiene sentido esta invitación de articularse? Fue unánime la respuesta: “Sí” y, por consiguiente, se estableció como tarea buscar las formas de continuar el camino iniciado.
Lazos comunes desde las bases
Monseñor Lizardo Estrada, secretario general del Celam, saludó esta iniciativa, cuyo objetivo es “reconocer y construir una vida buena en abundancia para todos”, porque “estamos convencidos de que todo trabajo es digno y constituye un pilar fundamental para la cohesión social”.
“Admiramos la labor que ustedes realizan en aquellos contextos donde el Estado se encuentra ausente o no cumple cabalmente con sus obligaciones, asegurando derechos que han sido dejados de lado por las autoridades”, acotó.
Invitó a los presentes a mirar juntos “los desafíos comunes que enfrentan los movimientos populares y explorar posibles formas de organización para abrirnos al diálogo y articularnos en la construcción de una comunidad sólida”.
El prelado aseguró que “abrigamos la esperanza de que este primer encuentro virtual genere los lazos necesarios para ir construyendo, desde las bases, una nueva forma de organización que nos permita alcanzar nuestros objetivos comunes”.
Nuevas formas de participación
El padre Sarlat recordó que “en los últimos 25 años se ha presenciado un renovado auge de la movilización popular desde el norte de México al sur de Argentina. Los movimientos sociales en los años noventas y especialmente en el año 2000”.
En la actualidad, se han alcanzado “nuevos picos de participación popular” como también “nuevos actores y organizaciones sociales emergieron en la escena política”.
Incluso los movimientos sociales tradicionales, como los sindicatos, “continuaron desempeñando un papel importante dentro del campo de los movimientos populares, desde el dicasterio al servicio del desarrollo humano integral”.
Es por ello que desde el Dicasterio para la promoción del desarrollo humano integral “animamos y apoyamos este encuentro esperando sea un espacio de hermandad”, sobre todo que “reúna a representantes de movimientos populares que caminan juntos y hacer oír y dar visibilidad a las preocupaciones sobre el incremento de las injusticias ocasionadas por el sistema capitalista y excluyente”.
Amén de todos los desafíos – destacó Sarlat – es momento también de proponer “soluciones, alternativas y nuevas formas de lucha en defensa de los derechos que los convocan, principalmente tierra, techo y trabajo”.
“El Papa Francisco los llama poetas sociales porque tienen la capacidad y el coraje de crear esperanza allí donde solo aparece descarte y exclusión. Poesía quiere decir creatividad y ustedes crean esperanza”, añadió.
Nota reproducida en ADN Celam