Una vez conocido el anuncio del ELN (Ejército de Liberación Nacional) en el que “da por terminada la suspensión unilateral de lo que denominan retenciones económicas (secuestros)”, la Iglesia católica colombiana, a través de la Delegación para las relaciones Iglesia – Estado de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) y el Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas en Colombia, emitieron este 07 de mayo un comunicado conjunto en el que lamentan esta decisión.
En su anuncio, los guerrilleros del ELN, en negociaciones de paz con el gobierno colombiano, aseguró que dicho compromiso estaba condicionado a la puesta en funcionamiento de un «fondo multidonante» con recursos de la comunidad internacional que les serían entregados y que según este grupo no se cumplió el acuerdo.
Contra la dignidad de la persona
Los acompañantes permanentes de la Mesa de Diálogos para la Paz, entre el Gobierno y el ELN, aseguran que «la privación de la libertad de personas no tiene justificación alguna y es un flagelo deplorable que atenta contra la dignidad humana y lastima la conciencia de toda la nación colombiana».
Así mismo, le hicieron un llamado todos los grupos al margen de la ley para que dejen de secuestrar, teniendo en cuenta que esta práctica «va en contravía del horizonte de paz que tanto anhela la sociedad colombiana».