Para resguardar la seguridad de los fieles, una parroquia católica ubicada en la localidad de Felipe Carrillo Puerto (La Ruana), en el estado mexicano de Michoacán, cerró temporalmente sus puertas y suspendió los servicios religiosos.
En un mensaje difundido en su página de Facebook el martes 27 de febrero, la parroquia Santa María de Guadalupe expresó su preocupación por la situación en la que se encuentra la comunidad: “Estamos en estado de riesgo, oremos por la paz de nuestro pueblo”.
“Por seguridad de todos, la parroquia Santa María de Guadalupe La Ruana permanecerá cerrada. El día de hoy no habrá oración ni misa. Por su atención y comprensión gracias”, se lee en la publicación.
Este anuncio se produjo después de que se difundieran videos en redes sociales de enfrentamientos armados en La Ruana, con el sonido de detonaciones y balas.
Esta comunidad forma parte del municipio de Buenavista Tomatlán, en la zona pastoral de la Diócesis de Apatzingán.
Tras su primer comunicado, el viernes 1 de marzo la cuenta de la parroquia emitió otro aviso informando que “no habrá catequesis por la inseguridad”.
La Misa dominical de las 6:00 a.m. del 3 de marzo también habría sido suspendida, de acuerdo a una publicación de Facebook de un colaborador del templo católico.
La violencia del crimen organizado en Michoacán
En 2023 se registraron más de 1.756 homicidios dolosos en Michoacán, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
En el ránking de las 50 ciudades más violentas del mundo durante 2023, elaborado por el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal, figuran 16 localidades mexicanas. Tres de ellas se encuentran en Michoacán: Zamora, en el puesto 4; Uruapan, en el puesto 18; y Morelia, la capital del estado, en el puesto 45.
El 29 de enero los obispos de la Provincia Eclesiástica de Morelia —que agrupa a la Arquidiócesis de Morelia y a las diócesis de Apatzingán, Ciudad Lázaro Cárdenas, Tacámbaro y Zamora— se congregaron en la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción en Apatzingán para ofrecer una Misa por las víctimas de la violencia que azota la región.
Apatzingán, ubicada a 187 kilómetros al suroeste de Morelia, ha sido duramente golpeada por la violencia derivada de la disputa territorial entre grupos como el Cártel Jalisco Nueva Generación, la Familia Michoacana y los Caballeros Templarios.
Conmovido por la situación de la región, en abril de 2021 el entonces Nuncio Apostólico en México, Mons. Franco Coppola, viajó a la Diócesis de Apatzingán y se reunió con los fieles, dándoles mensajes de aliento.
Nota reproducida en Aciprensa