A través de un pronunciamiento, la Red Eclesial Panamazónica (Repam) y la Conferencia Eclesial de la Amazonía (Ceama) expresaron su preocupación ante la situación que enfrenta el territorio amazónico debido a la prolongada sequía y la propagación de incendios forestales.
Este viernes 27 de septiembre, ambas organizaciones alertaron sobre la destrucción de millones de hectáreas del bioma amazónico: “Esta destrucción no solo afecta la flora y fauna, sino también a los pueblos que han habitado este territorio sagrado por siglos, cuyas vidas y culturas están profundamente interconectadas con los ecosistemas que ahora se encuentran bajo amenaza”.
En este documento, emitido en cuatro idiomas (español, portugués, inglés y francés), la Repam y Ceama lamentan que se continúe “transformando el regalo de la Creación de Dios en una mercancía” y que “la Amazonía continúe siendo percibida como un territorio por explotar”.
La crisis climática se agudiza
Aseveran que la presión de las actividades extractivas, tanto legales como ilegales, avanza a costa del valor intrínseco de la creación y de las comunidades que la habitan: “El modelo del capitalismo extractivo no solo es insostenible, sino que atenta directamente contra las formas de vida tradicionales y comunitarias que han permitido preservar este territorio durante milenios”.
“Sabemos que la Amazonía siempre ha experimentado períodos de sequía durante ciertos meses del año. Sin embargo, estas sequías se han agravado significativamente debido a la crisis climática, agudizada por las acciones humanas e impulsada por la explotación desenfrenada de los recursos naturales”, afirman en el pronunciamiento.
Asimismo, se hace referencia a la tala indiscriminada de árboles, la construcción de carreteras y otras actividades extractivas a gran escala “que dejan enormes cantidades de biomasa seca, que actúan como combustible en condiciones de sequía extrema, intensificando los incendios forestales”.
La Amazonía en un punto crítico
“Este círculo vicioso de sequías más fuertes, incendios descontrolados y acciones ineficaces por parte de las autoridades está llevando a la Amazonía a un punto crítico, amenazando su biodiversidad única y debilitando irreversiblemente su capacidad de regeneración”, manifiestan las organizaciones.
Advierten que “las consecuencias son devastadoras no solo para los ecosistemas locales, sino para todo el planeta”.
Las comunidades amazónicas enfrentan consecuencias devastadoras, incluyendo la muerte, graves afectaciones físicas y migraciones forzadas, lo que genera una crisis humanitaria alarmante; “actualmente, comunidades enteras están siendo desplazadas de sus territorios ancestrales”.
Llamado urgente a los gobiernos
La Repam y Ceama hacen un llamado a los gobiernos de los países amazónicos y a la comunidad internacional para que implementen reformas legislativas que fortalezcan la protección ambiental y los derechos de las comunidades sobre sus territorios: “La inacción de los Estados y la falta de cumplimiento de las normativas ambientales existentes requieren una acción urgente”.
“Los gobiernos y las autoridades competentes necesitan implementar reformas legislativas que fortalezcan la protección ambiental, reivindicar los derechos de las comunidades sobre sus territorios y garantizar los derechos humanos, especialmente de los defensores ambientales”, exhortan las instituciones.
“Hacemos un llamado urgente a los gobiernos de los países amazónicos y a la comunidad internacional para que adopten una acción firme y coordinada ante la devastadora crisis ambiental que enfrentamos”, reiteran.
Se acerca un punto de no retorno
La situación actual exige una nueva visión sobre la Amazonía que nazca del diálogo, articulando saberes tradicionales con conocimientos científicos contemporáneos y fortaleciendo iniciativas globales que reconozcan los ecosistemas amazónicos como sujetos de derechos.
“El respeto por la integridad de la naturaleza y su conservación deben convertirse en principios rectores para los modelos de desarrollo y la explotación de los recursos naturales, dado que no se puede continuar bajo este enfoque mercantilista y depredador”, señala el pronunciamiento que llama a promover de manera urgente una visión de buen vivir, “inspirada en los saberes ancestrales, en las economías para la vida y la capacidad de adaptación de las comunidades amazónicas, como una alternativa para mitigar las prácticas extractivistas existentes”.
Las organizaciones alertan sobre la pérdida de la capacidad de recuperación de los ecosistemas amazónicos, “ya que expertos señalan que la región podría estar acercándose a un punto de no retorno, poniendo en riesgo no solo a las poblaciones locales, sino también a la estabilidad climática del planeta”.
“Reiteramos que es fundamental interpelarnos sobre la relación que tenemos con la naturaleza, crear una conciencia ciudadana sobre la importancia de este territorio como nuestra casa común, y actuar con urgencia para adoptar medidas que frenen la crisis que estamos viviendo”, concluye el pronunciamiento.
Nota reproducida en ADN Celam
