La Asociación para la Participación de la Sociedad Civil Oviedo21 dio a conocer este viernes 3 de mayo la lista de ganadores de los Premios Libertas del Principado de Asturias 2024, uno de los cuales tiene como ganador a Mons. Rolando Álvarez Lagos, Obispo de Matagalpa y Administrador Apostólico de Estelí; actualmente exiliado en el Vaticano.
El prelado —que llegó a Roma en enero de este año junto a otro obispo, varios sacerdotes y seminaristas— ha sido galardonado con el Premio Libertas Internacional, por su compromiso con la defensa y la libertad del pueblo de Nicaragua, según señala Europa Press.
En rueda de prensa realizada hoy, el presidente de la citada asociación, José Antonio Álvarez, informó que la ceremonia de entrega de los premios se realizará el 29 de mayo a las 19:30 (hora local) en el Auditorio Príncipe Felipe de Oviedo.
En declaraciones al diario nicaragüense Artículo 66, el presidente de la Asociación resaltó que “Monseñor Álvarez no sólo es un líder religioso, sino también un acérrimo defensor de la libertad en Nicaragua”.
“Su valentía a exiliarse junto a más de 200 compatriotas y su precio de ingresar en prisión es un hecho especialmente significativo que hemos querido refrendar con este galardón”, aseguró.
¿Quién es Rolando Álvarez?
El Obispo de Matagalpa, conocido defensor de los derechos humanos y crítico de la dictadura de Daniel Ortega, y su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo, fue obligado a permanecer recluido dentro de su casa episcopal desde inicios de agosto de 2022, junto a algunos sacerdotes, seminaristas y un laico.
Dos semanas después, casi habían quedado desabastecidos de alimentos, la policía nicaragüense irrumpió en la casa y se llevó secuestrado a Mons. Álvarez rumbo a Managua, la capital del país, donde estuvo bajo arresto domiciliario.
En medio de un cuestionado proceso, la dictadura lo condenó el 10 de febrero de 2023 a más de 26 años de prisión, acusándolo de “traidor a la patria”. Desde entonces, ha sido recluido en la cárcel conocida como La Modelo, a la que son enviados los presos políticos del régimen.
Un día antes de ser condenado, Mons. Álvarez se había negado a subirse a un avión en el que Ortega y Murillo deportaron a más de 200 presos políticos rumbo a Estados Unidos.
Finalmente fue deportado a Roma, tras la mediación del Vaticano, el pasado 14 de enero.