Los gigantes incendios forestales que asolan Chile tomaron fuerza durante el viernes 2 de febrero, desde diferentes frentes, avanzaron hasta zonas pobladas dejando una estela de destrucción en las ciudades de Viña del Mar, Valparaíso, Quilpué, Villa Alemana y Limache; todas ellas ubicadas en la Región de Valparaíso, a 130 kilómetros hacia la costa, desde Santiago, la capital chilena.
Según los informes de SENAPRED (Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres) el paso del fuego ha provocado un promedio de 12 mil viviendas quemadas, 112 fallecidos hasta hoy y unos 39 mil ciudadanos damnificados. A ello también se suman la destrucción de 3 hogares de ancianos, el Jardín Botánico de Viña del Mar, 137 antenas de telecomunicaciones, fábricas de pinturas y 2 terminales de buses urbanos, entre otros.
«Es la tragedia más mortífera que enfrenta Chile en la última década» han dicho las autoridades municipales y regionales.
Desde La Moneda, el Mandatario Gabriel Boric decretó duelo nacional de dos días a partir de este lunes 5 de febrero, debido a la magnitud de la tragedia, y por la previsión de que la cifra de fallecidos «va a crecer significativamente».
Como parte de la ayuda estatal a los afectados se ha activado la Ficha Básica de Emergencia (FIBE) mediante el cual las autoridades podrán gestionar, en el menor plazo de tiempo posible, la ayuda a quienes han resultado afectados. Esto permitirá que las personas puedan iniciar la recuperación de sus hogares según el daño sufrido. Se estima que unas 10.700 hectáreas de superficie, entre forestal y urbana, han sido consumidas por el fuego.
Por lo pronto, debido al estado de excepción que decretó el presidente para la Región de Valparaíso, las fuerzas militares controlan las calles para evitar el colapso del tránsito y los saqueos de hogares de los damnificados que están alojados en los refugios, así también para habilitar la libre circulación de los vehículos de emergencia, muy necesarios en esta situación.
Iglesias y evangélicos afectados
El pastor Caleb Fernández, asesor regional de la ONAR (Oficina Nacional de Asuntos Religiosos) en la Región de Valparaíso, confirmó que 6 iglesias evangélicas también fueron alcanzadas por el fuego y varios pastores vieron con impotencia sus hogares envueltos en llamas.
La Iglesia El Evangelio Eterno (Miraflores), la Iglesia Asamblea de Dios Autónoma (Villa Dulce), el Centro Cristiano Internacional (Achupallas), la Iglesia Monte Sinaí, la Iglesia Bautista de Villa Independencia y la Corporación Internacional de Restauración son las iglesias siniestradas.
Frente a esta situación, el pastor Fernández ha mencionado que se están realizando las gestiones para disponer de templos que no fueron afectados para recibir los cuerpos de hermanos evangélicos fallecidos y para funcionar como velatorios y lugares de contención espiritual para familiares.
Solidaridad de organizaciones evangélicas chilenas
Caleb Fernández ha indicado que su despacho está coordinando el trabajo de voluntariado junto con la Delegación Presidencial, la Municipalidad de Viña del Mar y las iglesias evangélicas.
Ya han tomado contacto con organizaciones religiosas especialistas de emergencia (Adra, Cadena, Caritas, y Ejército de Salvación) para un trabajo mancomunado y eficiente con las autoridades regionales.
Confirmando su presencia, la División Chile del Ejército de Salvación ya ha instalado su primer comedor solidario en el sector Valle del Sol, uno de los más afectados, donde se entregarán raciones de alimentos diarios, además de kits de higiene y agua, mientras dure la emergencia, para lo cual están solicitando donaciones en sus diferentes centros de acopio a lo largo del país.
Nota reproducida en Evangélico Digital