Los Obispos hondureños denuncian “una parálisis legislativa” por el enfrentamiento entre los partidos políticos “incapaces de ponerse de acuerdo en la designación de un Fiscal General y un Fiscal General Adjunto”.
Una crisis política que se agudiza –según los prelados – por “el regreso de los males de antaño, con el atropello de la ley y de las instituciones. Los políticos y quienes nos gobiernan siguen repitiendo el pasado, impidiendo que se consolide la democracia en nuestro país”.
“Ante la delicada situación que estamos viviendo, confiamos en que el diálogo sincero, los consensos y el amor por Honduras, prevalezcan en todo el actuar de las instituciones del Estado, buscando con ello el bienestar general y el progreso social de todos”, han indicado.
Vivir en paz
Los prelados hicieron un llamado a la cordura, porque “la experiencia nos dice que el uso de la violencia, la coerción, la división y la compra de voluntades no son el camino del progreso y la justicia, sino que siempre estarán llevando al país hacia el fracaso y el deterioro institucional”.
“Los hondureños queremos vivir en paz, en armonía en un país de oportunidades; y para lograr estos anhelos, debemos orientar nuestros esfuerzos hacia la consecución de los objetivos primordiales, los cuales sólo podrán materializarse a través del diálogo y el consenso”, indicaron.
Para lograr este cometido “los dirigentes políticos deben actuar con transparencia y llenarse de sabiduría, de honestidad y de civismo”.
Nota reproducida en ADN Celam