El domingo 1 de octubre, ocurrió un lamentable accidente en la parroquia de la Santa Cruz en Ciudad Madero, Tamaulipas, cuando al celebrarse un bautizo comunitario el techo del templo colapsó y cayó encima de decenas de personas que se encontraban en la celebración eucarística.
Al lugar llegaron rescatistas, policías, personal de protección civil, vecinos de la zona, y religiosos, que buscan ayudar en las labores para buscar y rescatar a las personas que puedan estar bajo los escombros.
Aunque no hay cifras finales – ya que siguen los trabajos de rescate – se habla de que se encontraban dentro de la iglesia 70 personas, de las cuales 60 fueron llevadas a diversos hospitales, de las cuales solo quedan 23 hospitalizadas, 1 de ellas en estado grave y 11 personas fallecidas, seis mujeres, dos hombres y tres niños.
El obispo de Tampico, Monseñor José Armando Álvarez Cano, mediante un video mensaje aseguró que se vive un momento muy difícil en su diócesis, por lo que pidió ayuda a la población y bendijo a todos los que se encuentran apoyando.
Por su parte el párroco Ángel Vargas que logró salir con vida, no pudo contener las lágrimas al salir y ver al obispo a quién abrazó fuertemente. Ya en entrevista, narró lo que se había vivido y lamentó que esto ocurriera en un bautizo colectivo donde se encontraban varios menores de edad.
“Los que se fueron descansan en paz y los que nos quedamos seguramente sufriremos toda la vida (…) yo espero que todos los que han sido hospitalizados se recuperen pronto y que las familias fortalezcamos nuestra fe”.
“Venía una persona detrás de mí y él no alcanzó a zafarse”, relató el clérigo Ángel Vargas al medio 4C News
Mediante un comunicado la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) que se preside Mons. Rogelio Cabrera López, envió condolencias a todos los familiares de las personas que sufrieron alguna pérdida por este acontecimiento
“Nos unimos en oración ante la trágica pérdida de vidas y las lesiones sufridas por varios fieles durante el colapso del techo de la Iglesia de la Santa Cruz en Ciudad Madero, Tamaulipas. En este momento de dolor y luto, elevamos nuestras plegarias al Altísimo para que derrame su consuelo y paz sobre las almas afectadas y sus familias”.
La Iglesia en México afirmó que en estos momentos difíciles, nos unimos como un solo cuerpo para expresar nuestra solidaridad hacia todos los que han sufrido por esta tragedia. Y pidieron al Señor que les otorgue fortaleza para sobrellevar este difícil camino de duelo y sanación.
“Nuestra solidaridad y oraciones por los fallecidos y sus familias, así como también por aquellos que se encuentran atrapados y heridos. Rogamos a Dios para que les conceda pronta recuperación y consuelo en medio de este sufrimiento”.